La calidad diferenciada es un valor en alza. La Unión Europea viene legislando y promoviendo medidas para su impulso desde hace varios años. A través de las Denominaciones de Origen Protegidas (DOP) y las Indicaciones Geográficas Protegidas (IGP) se pone en valor el rico patrimonio gastronómico y cultural, especialmente del sur de Europa y, paralelamente, se consigue vertebrar el desarrollo y la sostenibilidad de los entornos rurales.
La Unión Europea no solo mantiene una constante política de aprobación de nuevas DOP e IGPs, sino también incentiva programas de ayuda y promoción de este tipo de productos alimenticios. España es uno de los países favorecidos por este tipo de políticas, y de los que más DOP e IGPs tiene reconocidas entre el conjunto de países de la UE (más de 300).
Las DOP e IGPs han tenido un éxito sostenido en Europa. El incremento de este tipo de productos agroalimentarios es positivo, tanto para el propio sector como para el consumidor. Por un lado, se refuerza la identidad e imagen de productos de calidad diferenciada. Por otro, son productos sobre los que se han establecido controles todavía más exigentes que los que se aplica en cualquier alimento que se comercializa en la Unión Europea.
No obstante, el concepto de calidad es un concepto subjetivo. El sobre coste de los productos de calidad diferenciada generalmente responden a unos gastos mayores de productores y fabricantes, no solo por los rigurosos controles que deben superar, sino también por tratarse, en muchos casos, de producciones limitadas, con características de elaboración e ingredientes muy específicos, etc. Y éstos deben ser asumidos y aceptados por el consumidor. Es precisamente en la diferenciación valorada por el consumidor donde se sustentan gran parte de los márgenes y el valor en el mercado.
Y es aquí donde estriba la cuestión principal: En saber si un sello de calidad diferenciada supone una ventaja competitiva real para las empresas. Incluso si este tipo de sellos ayuda, en el caso de las empresas españolas, no solo a vender más en el mercado nacional, sino sobre todo a exportar más y penetrar mejor en terceros países.
De cómo el consumidor sea de sensible a este tipo de productos se sostiene o no la apuesta de la UE por estas políticas de apoyo al sector. A este respecto una iniciativa europea, cuando menos novedosa, va enfocada precisamente a acercar a los consumidores a los productos con Denominación de Origen Protegida, de manera que sean capaces de percibir sus características diferenciadoras, especialmente los aspectos sensoriales de este tipo de productos.
Gilearn es un proyecto europeo de formación para consumidores en productos con Denominación de Origen Protegida (DOP), que está siendo desarrollado por un consorcio de importantes entidades de toda Europa, referentes en formación:
• UCP-ESB Facultad de Biotecnología - Universidad Católica de Portugal (Portugal
• QUALIVITA (Italia) – Fundación para la protección y la mejora de los productos agroalimentarios de calidad
• LUONNONVARAKESKUS (Finlandia) – Este Instituto de Investigación Agroalimentaria de Finlandia desarrolla la sostenibilidad y la competitividad del sistema alimentario. LUKE opera bajo el Ministerio de Agricultura y Silvicultura.
• AINIA (España) – En AINIA somos los coordinadores del proyecto.
Gilearn es un proyecto de formación desarrollado con el apoyo de la UE en el marco de "LIFELONG LEARNING".
Hemos trabajado en el marco de este proyecto, en colaboración con nuestros socios europeos, en el desarrollo de una nueva metodología con un nuevo enfoque innovador en la formación a consumidores, mezclando las nuevas tecnologías educativas (TIC) con la experiencia real de una “cata guiada”.
En concreto, hemos desarrollado un curso de formación online cuya principal innovación es la cata online guiada, de manera que el participante puede seguir la cata de producto desde su hogar con todos los elementos necesarios para poder realizarla con éxito.
También estamos trabajando en fortalecer las relaciones entre consumidores y las Juntas DOP reguladoras para asegurar el más amplio impacto de esta formación demostrativa y poderla después hacer extensible a los entornos de las DOP.
Como consecuencia de esta experiencia, hemos observado:
• Interés real por parte del consumidor en conocer mejor los atributos sensoriales que caracterizan a los alimentos de calidad diferenciada.
• Interés también por comprender la importancia de paneles de cata, así como aceptación de los trabajos y voluntad para realizar el entrenamiento necesario para poder describir las características sensoriales de los productos.
• Aumento del grado de sensibilización de las propias DOP en cuanto a la necesidad de paneles de cata bien formados y metodologías de trabajo contrastadas, a su vez que mayor sensibilidad respecto a la percepción y opinión del consumidor.
De momento, los pilotajes de este curso online de formación con cata guiada se han realizado en cuatro de los cinco países participantes y sus resultados iniciales son positivos. Falta por realizar el pilotaje en Francia, que será durante los meses de agosto y septiembre y se concretará en un curso de cinco semanas de duración.
Una vez realizadas las acciones formativas piloto, vamos a evaluar y validar los contenidos mediante la información recogida en cuestionarios de satisfacción y de evolución de la formación recibida. Sin duda, estos datos van a ser muy valiosos para contar con nuevas metodologías validadas y testadas, que serán herramientas útiles a disposición de las DOP, los consejos reguladores y las propias administraciones de los diferentes países europeos.
Las conclusiones del proyecto serán publicadas en la web del mismo y también todos aquellos interesados que quieran ampliar información de valor sobre esta acción formativa con consumidores, pueden suscribirse a los Newsletter que periódicamente se emiten. Esta suscripción se puede realizar desde la propia web.
AINIA (1736 artículos)