Nuestras acciones como consumidores influyen no sólo en las fluctuaciones de los mercados, también tienen una influencia significativa en nuestro sistema agroalimentario. Conscientes de ello, en AINIA Consumer hemos realizado un estudio con motivo del Día Mundial de la Alimentación, sobre el cambio de hábitos de consumo hacia estilos más saludables y sostenibles. En este artículo mostramos algunos de los resultados obtenidos en este estudio.
La población mundial aumentará hasta 10.000 millones de personas en 2050 y es nuestra responsabilidad asegurar un sistema agroalimentario con alimentos suficientes, variados, nutritivos, inocuos y asequibles para todos. Un sencillo gesto como introducir un alimento u otro en la cesta de la compra determina nuestra participación en el sistema agroalimentario y su sostenibilidad en el futuro. Como consumidores, debemos aumentar la demanda de alimentos saludables producidos de manera sostenible, e incorporar medidas en nuestros hogares para reducir la pérdida y desperdicio de alimentos.
Este cambio no es rápido ni fácil, pero se está produciendo. El cambio hacia un consumo de productos más saludables y producidos de forma sostenible se ha acelerado durante el último año y medio debido, principalmente, a la concienciación del consumidor de la importancia de la alimentación para su salud y, la concienciación por el planeta. En AINIA Consumer hemos realizado un estudio con motivo del Día Mundial de la Alimentación, dentro del Observatorio Digital del Consumidor, con una muestra de 1.842 consumidores a nivel nacional sobre el cambio de hábitos de consumo hacia estilos más saludables, actitudes frente al desperdicio alimentario y sostenibilidad en el packaging.
Como pudimos ver en el artículo “Conoce las principales tendencias y perfiles de consumidor detectados en el Barómetro AINIA Consumer 2021”, Los consumidores eligen cada vez más productos naturales, sin aditivos, que cubran sus necesidades nutricionales, que sean saludables y que sean responsables con el medioambiente.Esta tendencia hacia un consumo de productos más saludables se ha acelerado. Los consumidores, conscientes, de la importancia que tiene la alimentación para su salud, buscan productos más saludables que les ayuden a mejorar su sistema inmunitario para evitar, en la medida de lo posible, contraer enfermedades. Asimismo, la consciencia cada vez mayor de que la alimentación ayuda a mantener un estilo de vida saludable, invita a que el consumidor modifique sus hábitos de compra y consumo en favor de alimentos más saludables y mayor preocupación por la contaminación medioambiental provocada por los envases de los productos que consumen.
Según los datos de este estudio realizado por AINIA Consumer dentro del Observatorio Digital del Consumidor, un gran porcentaje de consumidores ha reducido el consumo de azúcares (63%), proteína animal (22%), carne roja (32%), alimentos congelados (19%) y de platos preparados (41%). Asimismo, los consumidores han aumentado el consumo de alimentos como las verduras (58%), las frutas (56%), las semillas y los superalimentos (49%), frutos secos (41%), “lácteos” vegetales (35%) y proteína vegetal (36%).
Los motivos por los que los consumidores han reducido el consumo azúcares, alimentos congelados o platos preparados, entre otros, y han aumentado el consumo de alimentos como frutas verduras, frutos secos o alimentos con proteínas vegetales son los mismos en casi todos los casos: por salud, por control de peso y/o, mayoritariamente, por mantener una alimentación más saludable. Asimismo, los cambios en los hábitos de cocinado acompañan a estos cambios que se están produciendo en el consumo de alimentos. 2 de cada 3 consumidores, considera que ha cambiado algo en sus hábitos de cocinado en los últimos años. Los principales cambios son: una alimentación más saludable, mayor tiempo dedicado al cocinado de alimentos y/o formas de cocinar más saludables como vapor, horno, menos frituras, etc.
El consumo de proteína vegetal, para cubrir necesidades nutricionales, se incrementa poco a poco en los hábitos del consumidor, como una forma saludable de alimentarse y cuidar la salud.
Legumbres, frutos secos y lácteos, alimentos más consumidos como fuente de proteína vegetal
Según los datos de este estudio estudio realizado por AINIA Consumer dentro del Observatorio Digital del Consumidor, los alimentos más consumidos como fuente de proteína vegetal son: legumbres (89%), frutos secos (84%), “lácteos” vegetales (83%) y semillas y superalimentos (67%). El principal argumento que esgrimen los consumidores en favor de la proteína de origen vegetal, frente a la proteína de origen animal, es que la proteína vegetal es más saludable, se digiere mejor y es más sostenible.
Desde AINIA trabajamos junto con las empresas del sector alimentación en la búsqueda de productos más saludables y sostenibles a través de la búsqueda de fuentes alternativas de proteínas para el desarrollo de nuevos ingredientes, el desarrollo de nuevos productos análogos lácteos a partir de fuentes vegetales o la generación de nuevas estructuras análogas a las cárnicas mediante diferentes tecnologías, entre otros proyectos. Si tu empresa está interesada en estas líneas de trabajo, te podemos ayudar.
Jesús Martínez (9 artículos)